5 razones por las que puedes ver un aumento del seguro de tu auto

1. Amparos “plus” 

Diferenciar los tipos de cobertura adicionales es uno de los factores que alteran el precio de tu seguro todo riesgo para tu automóvil. Por ejemplo, el tipo de asistencia que recibes como cerrajería o asistencia al hogar, pueden ser algunos beneficios que, por no estar incluidas en todas las pólizas, pueden incrementar el valor de tu seguro. Recuerda que existen pólizas diseñadas a las necesidades de cada persona y para diferentes tipos de riesgo.

2. Modelo del carro, su estado o el historial del conductor

En general, el seguro se paga con la vigencia de un año y en el trascurso de ese tiempo el vehículo pierde valor por su rodamiento o accidentes que se pueden presentar. También puede afectar condiciones particulares de uso que hacen que se desgaste más rápido o más lento, aspecto que depende también de la buena o mala manipulación que hace del vehículo el propietario de la póliza. Un carro desgastado y viejo con un propietario de mala reputación al volante es poco probable que encuentre un seguro que lo cubra y si se lo ofrecen, podría costarle tanto que en pocos años pagaría en seguros más que el valor de mercado del carro. Por otro lado hay modelos de carros que son altamente propensos a ser hurtados; estos automóviles suelen tener pólizas más altas.

3. El valor del vehículo cambia cada mes

Digamos que chocaste contra otro vehículo, tuviste la culpa y vas a cobrar tu seguro. Y notas que tu carro, que al comienzo de año estaba asegurado con un avalúo de 28 millones de pesos, fue registrado por la aseguradora con un valor de 27,8 millones. Leticia Rueda, experta en seguros de carros de alta gama de Liberty Seguros explica que eso ocurre porque la industria actualiza cada mes el valor comercial de los vehículos, de acuerdo con la información que se recopila a través de la guía Fasecolda, que tiene validez en el territorio nacional. Por eso, los siniestros se liquidan de acuerdo con el valor comercial del vehículo correspondiente al mes en que se generó la ocurrencia. Sin embargo, en algunas compañías es común que los vehículos recién salidos de fábrica mantengan el valor que pagó el propietario.

4. Edad y género del conductor, así como ciudad de circulación

Es importante resaltar que cada aseguradora tiene parámetros diferentes para definir una edad mínima viable para asegurar a una persona. Para algunas los menores de 21 no son asegurables, así como los mayores de 30 años son “más seguros” y por lo tanto su póliza puede ser menos costosa. Asimismo, el género puede influir en el precio, pues para algunas aseguradoras las mujeres son más precavidas, por lo que su póliza puede ser más baja si se compara con la de un hombre. Finalmente, la ciudad de circulación también influye, pues hay algunas capitales donde algunos modelos de carros pueden correr más riesgo que en otras urbes.

5. El famoso deducible

Este concepto tan criollo como el sancocho de gallina (en países como España no se aplica el deducible en algunas aseguradoras), nace de la corresponsabilidad entre aseguradora y asegurado sobre el vehículo a proteger. En otras palabras, la compañía de seguros te dice: ‘Ok, te estoy cubriendo, pero también debes cuidar tu patrimonio’. Hay diferentes tipos de deducibles y porcentajes, los cuales influyen en el precio final de la póliza: puede ser un deducible del 10%, o un pago mínimo (generalmente puede ser de $650.000) y simplemente no tener deducible (estas pólizas pueden ser las más costosas).